Un MITO

Por Carlos Goñi (Cuéntame un mito): NARCISO Y ECO, LA VOZ Y LA FLOR

"El dios del río Cefiso y la ninfa Líriope tuvieron un hijo al que pusieron el nombre de Narciso. Cuando nació, consultaron al adivino Tiresias sobre el futuro de su retoño, el cuál les anunció que tendría una larga vida si evitaba contemplarse a sí mismo. Para prevenir que el niño viera su imagen en las aguas del Cefiso, sus padres decidieron separarse y Narciso se fue a vivir con su madre a un paraje lejos del río.

Narciso creció y se convirtió en un joven muy hermoso. Muchas doncellas se enamoraron de él apasionadamente, pero Narciso rechazaba su amor. Una de ellas fue la ninfa Eco, quién corrió la misma suerte. La joven no pudo resistir verse rechazada, y la desesperación la llevó a recluirse en las montañas lejos de todo el contacto con el mundo. La ninfa sólo pensaba en su amor y dejó de comer de forma que adelgazó tanto que quedó convertida en voz, capaz únicamente de repetir el final de las palabras que escuchaba.

Las jóvenes rechazadas clamaron venganza a Némesis, quien hizo que, tras una cacería, Narciso sintiera sed y se acercara a una fuente para beber. Al inclinarse sobre el agua contempló su propio reflejo y quedó enamorado de él. Tal fue el amor que sintió por aquella imagen, que se olvidó de todo y se quedó contemplándola hasta que pereció. En el lugar donde murió nació una flor a la que en su honor dieron el nombre de Narciso."

La interpretación de un mito puede ser tan variada como las diferentes opiniones existentes de cada persona.
Para mí este mito refleja por un lado, el de Narciso, el egocentrismo que se puede llegar a tener (llevado al límite, claro está) cuando creemos firmemente en nuestros valores y características positivas, que nos llevan a no ver más allá de nuestro propio reflejo y a no enamorarnos de nadie más excepto de nosotros mismos.
Por otro lado para mí la representación que refleja Eco, es absolutamente el lado opuesto, la baja autoestima que en ocasiones tenemos y que nos impide ver lo que realmente valemos y nos hunde en un mundo de pesar que no nos deja disfrutar de la vida.

La naturaleza busca el equilibrio, y como seres nacidos de ella debemos encontrar un equilibrio en nuestra persona que no nos lleve a ser ni "Narciso" ni "Eco"...
Valorar nuestros aspectos positivos y negativos, aceptarlos y aceptar y respetar a los demás con sus cosas buenas y malas y quererlos con todo ello, nos hace disfrutar de la gente que nos rodea y de nosotros mismos...
Esa es mi opinión, ahora vía libre para quién quiera dar la suya.